Me hicieron esperar por mi habitación, cuando ya estaba pagada, le dieron habitaciones a quienes iban llegando y no habían pagado, y la mía nada, hasta que me paré a decirles, por qué se me hizo ingusto, las recepcionistas lucían cansadas o tenían prisa de salgo, la vibra no era buena, parecen trabajar a fuerza, la piscina parece laberinto, aun que es de paso o de descanso que veo asi lo ofrecen, las habitaciones mucho que desear, sin frigobar en una junior ni en suprem. Me gusta más el de Polanco. Creo las chicas necesitan vacaciones.